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Limpiar los cristales de tu casa o negocio es una tarea algo complicada si no tienes mucha experiencia, ya que es difícil que queden perfectos.

Sin embargo, unos cristales limpios y transparentes contribuyen, y mucho, a dar una imagen cuidada (si se trata de tu casa) y profesional.

Para ayudarte a limpiar tus cristales a un nivel experto, hoy te traemos este artículo, en el que descubrirás algunos trucos (y productos) útiles para realizar dicha tarea rápida y eficazmente.

¡Vamos allá!

5 claves para limpiar los cristales

1# Contar con los materiales adecuados

Antes de ponernos manos a la obra, hay que tener muy claro qué tipo de materiales y productos vamos a necesitar: un estropajo o esponja suave, bayetas, paños, un barreño o recipiente grande y diversos productos de limpieza (que veremos en profundidad más adelante).

También necesitaremos agua tibia (para mayor eficacia de los limpiadores) y papel de periódico.

2# Evitar los días de mucho sol y calor

Hay que tener en cuenta algo importante, y es que hay que evitar limpiar los cristales durante las horas de sol más intensas.

¿Por qué? Por dos motivos:

  • La incidencia directa de la luz del sol genera reflejos y brillos que te impedirán ver con claridad si quedan manchas en el cristal.
  • Si hace demasiado calor, los líquidos se evaporan más rápidamente y su eficacia limpiadora se reduce.

A raíz de lo anterior, lo mejor es limpiar los cristales en días húmedos y durante las primeras horas de la mañana o las últimas de la tarde.

Limpiar los cristales: trucos y productos

3# Aplicar el limpiador

Ahora, toma el barreño y mezcla el agua tibia con el producto de limpieza.

Ojo aquí, porque las mezclas serán diferentes según el producto a aplicar y deberás seguir las indicaciones del fabricante para evitar intoxicaciones u otros problemas.

El amoníaco, por ejemplo, tiene un gran poder desengrasante, por lo que puede venir muy bien para limpiar los cristales de una cocina u otros lugares similares.

En caso de mezclar detergente o jabón, la clave es mezclarlos con el agua y conseguir algo de espuma. Pero no te pases, ya que con demasiada espuma se complica el aclarado posterior.

Con la mezcla lista, moja el estropajo, paño o bayeta en la mezcla y aplícala suavemente sobre los cristales y deja que actúe durante unos minutos (especialmente si el cristal está muy sucio).

Además, puedes aprovechar este momento para limpiar los marcos, soportes y otros elementos de las ventanas.

4. Aclarar los cristales

Después de limpiar los cristales, toca aclararlos.

Para ello, basta con pasar una bayeta o paño limpio sobre el vidrio. También puedes ayudarte con una regleta para “arrastrar” el líquido de arriba a abajo.

5. Eliminar manchas, marcas e impurezas

Una vez hayas retirado todo el líquido limpiador, llega el momento de ultimar los detalles. Y nunca mejor dicho, porque hablamos de eliminar las posibles manchas, impurezas y otras marcas para que el cristal quede perfecto.

Para hacerlo, lo más idóneo es pulverizar la sustancia de limpieza directamente en el paño y luego repasar los puntos deseados.

Para retirar el producto, se puede emplear un paño de microfibra o papel, como por ejemplo el de periódico, o incluso filtros de café.

Remata el trabajo con un rascador si es que existen restos difíciles de eliminar.

Los mejores productos de limpieza están en Kelttys

Y con esto, hemos llegado al final del artículo.

Esperamos que te haya resultado entretenido y muy muy útil para limpiar los cristales de tu casa o negocio adecuadamente.

Recuerda que en Kelttys disponemos de una amplia gama de productos de limpieza profesional, por lo que podemos ayudarte con cualquier cosa que necesites.

¡Hasta la próxima!